Aguardando el pronunciamiento de la Audiencia Nacional de España, luego de que la Fiscalía apelara la decisión que negó su extradición a Estados Unidos, el general venezolano Hugo “El Pollo” Carvajal, concedió una entrevista exclusiva a esta reportera. En su casa en Madrid, rodeado de su familia y amigos, el hombre que desde las vísceras de los servicios de inteligencia vigiló ¿o espió? al país durante más de 10 años, aceptó asomar parte del tesoro de sus secretos. Se guarda, al menos todavía para la opinión pública, la precisión de informaciones que las autoridades americanas aspiran ratificar y que lo mantienen como el testigo y/o protagonista más preciado, con conocimiento suficiente para desentrañar la operación criminal en Venezuela y posiblemente hacer tambalear la corporación delictiva sobre la que se sostiene Nicolás Maduro.
El hacha de guerra la levantó el 21 de febrero pasado, cuando reconoció a Juan Guaidó como presidente encargado de Venezuela.
Carvajal fue alumno de Hugo Chávez en la Academia Militar desde donde nació una estrecha relación que se prolongó hasta la muerte del presidente. Desde su ascenso a coronel en el 2000 y hasta el 2003, fue director de Investigaciones de la Dirección de Inteligencia Militar (DIM), donde continuó avanzando hacia la subdirección hasta que en el 2004, como general de brigada, asumió la dirección. Allí estuvo hasta enero de 2012 cuando su jefe máximo ya tenía la muerte marcada en la frente. La tradición es que en la dirección de la DIM nadie dure más de un año, cuestión de precaución. Demasiada información poderosa para un solo hombre que además es militar. “Estuve allí más de siete años, un record”, dice orgulloso “El Pollo” que sabe que la conclusión natural, es que Chávez creía plenamente en él.
La leyenda dice que era el hombre en quien Chávez más confiaba en Venezuela. "No es leyenda. Es la verdad", afirma.
Parco y ostensiblemente cuidadoso, el general Carvajal arroja el titular al describir la situación del país: “Toda Venezuela es ruta del narcotráfico”. Lo hace con la conciencia de quien es señalado por ese delito desde Estados Unidos en este proceso judicial por el que aguarda y que podría significar perder o negociar su libertad. Al respecto, el general insiste en su inocencia. Antes de este proceso que lo mantuvo en prisión en España algo más de cinco meses, Carvajal había sido sancionado por la Oficina de Control de Bienes Extranjeros, OFAC. Fue en el 2008 cuando el Departamento del Tesoro lo acusó de evitar que autoridades venezolanas interceptaran envíos de droga de las FARC. También fue señalado por suministrar armas y documentos de identidad a miembros de la guerrilla colombiana.
¿Cómo opera el narcotráfico en Venezuela?
La droga la transportan para su exportación por todas las vías del país. Las autoridades deberían y podrían evitar eso, pero hay intereses dentro del Gobierno de Maduro para que eso continúe.
Se está refiriendo al Cartel de los Soles…
He repetido que eso es un mito. Conozco muy bien a la Fuerza Armada Nacional Bolivariana, FANB, y te puedo asegurar que no está estructurada como un cartel. Lo que quiero decir, es que dentro del inmenso deterioro moral que existe, en la FANB se lucran del tráfico de droga y el Gobierno lo permite, es más lo estimula, aunque no necesariamente la institución opera como una estructura organizada. Repito, toda Venezuela está al servicio del narcotráfico porque la voluntad del Presidente no pasa por evitar la criminalidad. Ninguna exportación de drogas excluye la complicidad de funcionarios del Estado en puertos y aeropuertos. De eso se trata. Es la burocracia del Gobierno al servicio del delito. ¿Qué hace la autoridad aeronáutica que tiene la obligación se supervisar vuelos que salen y entran? ¿Y los jefes de seguridad? ¿Y las aduanas aéreas y marítimas? ¿Y la dirección antidrogas de la Guardia Nacional? Nadie ignora lo que allí sucede. Todos son cómplices. Se trata de operaciones delictivas puntuales en sectores claves. Es la multiplicación del delito que opera en cada lugar según su propia dinámica. No es que el director antidrogas de la Guardia Nacional instruya a su personal para actuar como socio del narcotráfico, pero los efectivos de ese componente –por el deterioro moral y económico- trabajan para que nada impida el transito de la droga por el país y para que sea enviada a distintas partes del mundo, transportada por los medios necesarios. Puedo asegurar que los jerarcas del régimen están al servicio del flagelo.
La estructura criminal en Venezuela no solo opera para el narcotráfico.
Cierto. La Fuerza Armada en especial, ha sido permeada por el crimen, las mafias, el narcotráfico y la guerrilla. Es un plan elaborado desde Cuba para tener a los militares a su lado. Con el tema del oro, por ejemplo. A las unidades militares que están en las minas, los dejan hacer lo que les da la gana. Permiten la extracción y saben para quién del negocio tienen que trabajar. Un ejemplo: un hato gigante llamado “La Vergareña”, en el estado Bolívar. El Gobierno dijo que iba a destinarlo a la producción agropecuaria y se lo entregó al Ejército. Allí ni se siembra, ni hay ganado. Los oficiales asignan pedazos de tierra y descaradamente cobran en centenares de miles de dólares a los interesados en explotar el oro. Otra situación muy grave se vive en la frontera con Colombia donde hay contrabando de drogas, de armas, de combustible, comida, medicinas, cobre, de lo que sea. Los militares que están en esa inmensa cantidad de alcabalas que hay en Venezuela -cosa inusual también-, cobran- y los jefes se hacen los locos. Esto que enumero es solo una parte de la corrupción y del plan -efectivo hasta ahora- para convertir a los oficiales en subalternos corruptos al servicio de las mafias.
¿Ve posible un enfrentamiento militar con Colombia?
Me preocupó el despliegue militar que hizo Venezuela en la frontera, pero por lo perversa que significa esa movilización utilizada como amenaza política. Colocar esa cantidad de equipos y recursos en la frontera lleva una intención, yo diría que macabra. Me recordó lo que sucedió en Argentina con el tema de Las Malvinas, para desviar el desastre que tenían dentro de su país. Venezuela está peor. Los equipos que movilizan son de cierta envergadura pero están inoperativos. Es el caso de que los cables que conectan los radares con las baterías de tiro fueron robados para fundirlos. No es saboteo, es la crisis y el deterioro. Para activar los equipos habría que reemplazar los cables, mandarlos a buscar a Rusia, etc. Las FANB están como el país: vueltas un desastre, disminuidas.